domingo, 30 de septiembre de 2018

NORBERTO GALASSO La historia se ha ido falsificando con su consiguiente efecto político





     La historia se ha ido falsificando con su consiguiente efecto político: Evita podía ingresar al panteón de las grandes figuras a condición de que ello sirviera para impedir el ingreso de su esposo y del peronismo como expresión de movimiento de masas que había cuestionado el orden oligárquico nacionalizando los depósitos bancarios y el comercio exterior, junto a otras tropelías cometidas contra la clase alta y el capital extranjero.

     El liberalismo conservador y la izquierda abstracta se habían concentrado en aceptar a Evita, no ya como compañera del general y puente entre éste y los trabajadores, eslabón fundamental en la conducción bonapartista del movimiento policlasista, sino reduciéndola al asistencialismo y aún más, convirtiéndola en la izquierda que se oponía a la tendencia derechista y profascista de su esposo. Todo lo que en ella configuraban virtudes aparecían como la contracara de la inescrupulosidad, la mendacidad y la falta de sentimientos de su esposo.

     Ésta fábula se creaba especialmente para consumo de los amplios sectores de la clase media seudoculta de las grandes ciudades, que necesitaban superar su viejo gorilismo dando paso a una apreciación más progresista del peronismo, demostrando así su amplitud de criterio sin por eso caer en posiciones "populistas" o antiimperialistas. En última instancia consistía en elevar aquel viejo gorilismo a un nivel superior que permitiese los méritos de Evita sin por eso reconocer los de Perón.

     Se comenzó a impulsar una estrategia, cuyo primeros esbozos correspondieron a intelectuales provenientes de la autotitulada izquierda, es decir aquellos que apoyan a los movimientos obreros y campesinos de todo el mundo (con profusas citas de Marx y Lenin) para reservarse el derecho de descalificar a todos los movimientos populares surgidos en el propio país, a unos por bárbaros e inorgánicos, a otros por populistas y sometidos a la burguesía, y a otros por fascistas, inmorales y autoritarios.

     Desde esa izquierda, que venía de una ardorosa lucha contra el peronismo, brotó esa estrategia que sería tan bien recibida por las minorías dueñas de la Argentina. Se trataba de reconocer parcialmente a Evita, sacralizarla, convertirla en un póster (como lo harían luego con el "Che") o en una santa sin política, toda ella entregada a satisfacer los pedidos de los desvalidos y carenciados.

     No una Evita, como había sido, puente entre Perón y los trabajadores, cumpliendo un rol fundamental dentro del frente policlasista, sino la misma hada buena con que la había rotulado la estupidez de los burócratas del peronismo. A una hada o santa se la podía venerar pero no imitar porque son cosas del más allá.

     Esa Evita que fabricaron debía quedar desgajada del movimiento popular y de Perón, flotando en el cielo de la misericordia o en el póster rojo de la revolución abstracta.
Cuando uno lee cierta prensa, piensa que una gran parte de los intelectuales argentinos ha hecho un pacto con el diablo. En general, son tipos inteligentes, informados, brillantes algunos, capaces de comprender hasta la minucia el desarrollo social de algunos pueblos lejanos donde actúan dirigentes de exóticos nombres, pero resultan de una gran ceguera para ver el cuadro grandioso que se desarrolla en su propio país, como si su alma estuviese enajenada para todo lo que significa aprehender la realidad nacional.

     David Viñas declara en Página 12 del 29 de marzo de 1988: "Eva Perón habrá sido subversiva, rebelde, todo lo que quieran, pero no fue una revolucionaria porque no cuestionó el régimen actual de la propiedad". Y agrega: "Revolucionaria fue Rosa Luxemburgo".

     Yo le contesto que el error suyo consiste en suponer que la única revolución posible en América Latina es socialista. El viejo Lenin le hubiese advertido que en los países sometidos por el imperialismo la tarea esencial es la revolución nacional y que los socialistas, en vez de menospreciarlo, deben luchar, desde su propia perspectiva y tras sus propios objetivos, junto al resto de los luchadores antiimperialistas porque ese es el camino hacia el socialismo.

     Mao le hubiese dicho que la tarea de la revolución China consistía en una revolución nacional y en una revolución democrática. Es decir que son revolucionarios quienes enfrentan al imperialismo, aunque no sean socialistas.

     Si descalificamos a Eva y a Perón como revolucionarios (a ellos que lideran el proceso de liberación nacional más profundo llevado a cabo en la Argentina), entonces no hay ningún revolucionario en nuestra historia. Ni San Martín, ni Dorrego, ni Varela porque no eran socialistas, ni Yrigoyen cuya concepción era agrarista, ni los dirigentes de la izquierda tradicional que no consiguieron obtener la confianza de los trabajadores.

     Claro usted dice revolucionaria fue Rosa Luxemburgo; y a mi suena como esa opinión de los argentinos recién vueltos del viaje a Europa y que proclaman con los ojos en blanco: “¡subterráneos son aquellos... qué limpieza... y qué educación!”, mientras le hacen asco al país de mierda en que les tocó nacer.

     Aquella admirable mujer, Rosa Luxemburgo, le diría a usted señor Viñas: "en lugar de rendirme elogios ¿por qué no se ocupa de averiguar en qué caminos anduvo y anda la clase trabajadora de su país, esos socialistas en potencia que guardan afecto a Eva y a mí apenas me conocen? Sea usted socialista Viñas, pero de su propio país y de su época. No se desencuentre, una vez más, con los hombres y mujeres de trabajo que veneran a Evita...”.




Del blog Discípulos de Cooke, 08/12/2011. En Verdades y mentiras acerca de Perón y Eva Perón, 1996 

viernes, 28 de septiembre de 2018

JULIÁN AXAT Justicia por Omar Cigarán




EL JUGUETE DE OMAR CIGARÁN

Poco tiempo antes
de que Omar Cigarán fuera asesinado
por un escuadrón de la policía bonaerense
estuvo detenido en el Centro Almafuerte
donde fabricó en un taller de juguetes
un auto de madera
con el que dio rienda suelta a su imaginación
y viajó a distintas partes del mundo
mirando la ventana desde su celda
en su descapotable rojo y amarillo
El día que salió en libertad
no lo llevó consigo
hoy solo queda una foto de aquel juguete
que no retrata la inocencia
sino la crueldad del destino
la forma o circunstancia de la muerte
digitada por la divina miseria de los hombres
pues por esas alteraciones del tiempo y la materia
el objeto ha mutado en las manos de otro como Omar
convertido quizás en otro extraño objeto
que ya no podemos identificar





jueves, 27 de septiembre de 2018

GUILLERMO SAAVEDRA Si Ellos Son La Patria



DOMINATRIX COMIÉNDOSE A UN ENANO

Un cabezón jailaife y una urraca
empomándolo al pie de la bandera
hicieron de la patria una leonera,
del himno nacional, una matraca.

En plan de marioneta escabechada,
con voz de chaucha ausente y mal cojida,
el cabezón cantaba nuestra herida
como anunciando tierra liberada.

La esperpéntica urraca cabeceaba
cual perro de peluche en colectivo,
muy cachonda, en éxtasis masivo
de su culo de garca con ochavas.

Morirás, cabezón, lechuga espesa,
engrampado en un dildo a la francesa.


A OTRO TURRO FALAZ E INCONSONANTE

¿Con qué rima Sandleris?, me pregunto.
¿Con qué rima esa cara de oler mierda,
de estériles testículos a cuerda,
de perro abotonado con difunto?

¿Con qué rima Sandleris, con qué rima
este turbio inquilino del idioma?
¿O es otro turro en pasta que se asoma
sin nada que consuene y lo redima?

Basta ver su prontuario de escalope
de carne gorilácea enharinada:
toda la guita afuera amarrocada,
mientras nos garcha a todos al galope.

Mefítico Sandleris, cheto en caja
que rimas solamente por la raja. 



“I AM READY TO RUN”, GRAZNÓ UN CHORIZO

Con su lengua de trapo humedecida
en el jugo rectal de una francesa
que en el Fondo nos quiere y que no cesa
de dejarnos en bolas y sin vida,

esta flema envasada en impotencia,
farfullando en inglés lo que en castizo
no puede pronunciar, este chorizo
contuso de su propia inconsistencia,

pasándole la gorra a los patrones
del mundo y sacudiendo la alcancía,
“I am ready to run”, les prometía,
pensando en improbables reelecciones.

El pueblo, mientras tanto, contestaba:
“¡Te vamos a ensartar hasta las tabas!”


A UN SIRVIENTE SERVIL CON SEBORREA

Esa jeta de teta disecada
se dispara hacia un mate con tres pelos,
que son más que los fláccidos libelos
de su ingenio de brótola alquilada.

Y ese look de rodilla es un prontuario
que al igual que su nombre lo delata:
es la app genuflexa en modo “rata”
que filtra el vendaval de un urinario.

Ex plumín del panfleto de Massera
con Perfil de bragueta comatosa,
hoy consagra, con letra temblorosa,
a otra prensa mortal sus pedorreras.

Tendrás muerte servil, temprana y cruenta,
colgado del calzón de una sirvienta.


A UNA HIENA CON ROPA DE FAJINA

No es un pato ni un patio sino un pasmo
etílico y patético, luctuoso
por su metabolismo desastroso:
cada vez que reprime, tiene orgasmos.

Esta vinchuca otrora descastada
volvió al redil con ánimo exaltado
cargándose a los pobres jubilados
con su cara de concha inhabitada.

Ahora repta con ropa de fajina,
persiguiendo a supuestos extremistas
–aborígenes, narcos, ¡yijadistas!–
e inventando containers de Cristina.

Morirás en tu ley, sorete en hebras:
chapaleando en un balde de ginebra.


A UN MASCARÓN EUNUCO DEL FASCISMO

Medio polvo al azar, como al desgano,
fue la causa fatal del nacimiento
de esta nimia erupción del pavimento
fermentada en un nido de gusanos.

Lepidóptero gris de medianoche,
mascarón oxidado del fascismo,
onanista empachado de machismo,
chueco impar, menos baby que fantoche,

es el flujo radial de los taxistas
y el veneno puntual del resentido,
la resaca moral del malparido
y el requecho coral de los golpistas.

Morirás suicidado al ver tu facha
escurriéndose turbia entre tus cachas.


A UN GARCA EN FALSO TRANCE HOSPITALARIO

Te internaron de urgencia por si acaso
algún dios se dignaba a hacer justicia.
Pero dios está enfermo y tu codicia
sigue urdiendo voraz nuestro fracaso.

Seguirás por un tiempo en tu baldío
de millones de mangos escruchados
con la banca a favor. Pero cuidado,
pija endeble trincándose un vacío:

volverán los dolores a tu pecho
de carancho aterido y desplumado,
y tu vientre de bagre embalsamado
poblarán dos mil pólipos maltrechos.

Morirás, Nicolás, en tu escabeche,
en tu propia y baldía mala leche.


NI MANSO NI TRANQUILO: CHETO EN CELO

Tras tres años artríticos y astrosos
–que parecen tres siglos de calambres,
tres milenios colgados de un alambre–,
tras tres años de palos alevosos,

reculando en chancletas de manteca,
esta costra de un chancro incandescente
devenida en pedorro presidente
no se arredra y promete más jaquecas.

Inmune a las desgracias que ha traído,
prendido a un par de bolas mendocinas,
con su cara de asbesto vaticina:
“Les puedo hacer más daño, no hagan ruido”.

No morirás ni loco ni tranquilo:
morirás en gayola, culo en vilo.


A UNA GÁRGOLA ENFÁTICA Y NOCTURNA

Hortaliza agrotóxica y rastrera,
lamparón imborrable de la historia
de un país percudido en la memoria,
cataplasma sebácea y camorrera,

ignominia chaqueña, craso mueble
rematado mil veces en las urnas,
esta enfática gárgola nocturna
sancochada en retóricas endebles

volvió al circo a sudar adrenalina
sacudiendo los mocos del pañuelo:
“¡Soy actriz, como Tita, la Merello,
me divierten las crisis argentinas!”.

Que la muerte la tueste bien despacio
por su culo vandálico y batracio.


A UN BLONDO SALAMÍN PICADO FINO

Hay un boludo haciendo morisquetas
en la pantalla plana de la infamia.
Es mórbido avatar de una endogamia:
su madre al darlo a luz secó sus tetas.

Elongador peneano desgastado
de tanto estirar chetas, breves vergas
con éxito dudoso, solo alberga
un triste retintín recalentado:

“Pará, pará, pará”, chumba el cateto
así le manden fruta o flan casero.
Naufraga la verdad en su puchero
de sueltos animales con panfletos.

Fanfa sin fans, mamón de escaso tino,
morirás salamín: picado fino.


FORRO VENCIDO VUELVE A SUS FARMACIAS

Escroto abandonado en la pileta
de un telo marginal, triste banana
de yeso de hospital, a este Quintana
acaban de colgarle la galleta.

Alegre propulsor de la caída
del sueldo de la gente laburante,
este oscuro prospecto expectorante
se escurre entre dos negras escupidas.

Forro vencido en raja de muñeco,
placebo rancio, pócima en desgracia,
ya vuelve este negrero a sus farmacias
después de haber currado a palo seco.

Confeso hijo de Buda sin remedio,
que mueras como un chori: abierto al medio.


                         Guillermo Saavedra (Buenos Aires, 7 de octubre de 1960). Poeta, escritor…





lunes, 24 de septiembre de 2018

El amor y la igualdad




PARA QUE REINE EN EL PUEBLO  

Los muchachos peronistas,
todos unidos triunfaremos,
y como siempre daremos
un grito de corazón:
“¡Viva Perón, viva Perón!”.


Por ese gran argentino
que se supo conquistar
a la gran masa del pueblo,
combatiendo al capital.
¡Perón, Perón, qué grande sos!
¡Mi general, cuánto valés!
Perón, Perón, gran conductor,
sos el primer trabajador.


Por los principios sociales
que Perón ha establecido,
el pueblo entero está unido
y grita de corazón:
“¡Viva Perón! ¡Viva Perón!”.


Por ese gran argentino
que trabajó sin cesar
para que reine en el pueblo
el amor y la igualdad.
¡Perón, Perón, qué grande sos!
¡Mi general, cuánto valés!
Perón, Perón, gran conductor,
sos el primer trabajador.


Imitemos el ejemplo
de este varón argentino
y siguiendo su camino
gritemos de corazón:
“¡Viva Perón! ¡Viva Perón!”.


Porque la Argentina grande
con que San Martín soñó
es la realidad efectiva
que debemos a Perón.
¡Perón, Perón, qué grande sos!
¡Mi general, cuánto valés!
Perón, Perón, gran conductor,
sos el primer trabajador.


A 70 años de la primera grabación de “la marchita”.
Porque la lucha continúa. ¡Viva!


Resistimos en los '90,
volvimos en el 2003.
Junto a Néstor y Cristina,
la gloriosa JP.


domingo, 9 de septiembre de 2018

ROLADO REVAGLIATTI Al Fondo Poetario Internacional




Al F. P. I.

¿Cómo la descompondremos?

¿Cómo la descompondremos más y mejor?
¿Sabremos descomponerla sin música funcional
cruda
sin farolitos?

¿Olernos la retaguardia le vendría bien
a la vanguardia?
¿Se quejarán los administradores regionales
plañideramente
al Fondo Poetario Internacional?


EL DECESO

El deceso de Augusto enluta
al Banco Riggs de Washington

El deceso de Augusto José enluta
a la Agencia Central de Inteligencia en Chile

El deceso de Augusto José Ramón enluta
a Margaret Thatcher y a la institución liderada por Juan Pablo segundo

El deceso del General Augusto José Ramón enluta
a su consejo militar de 1973

El deceso del General Augusto José Ramón Pinochet Ugarte
enluta el 10 de diciembre de 2006

Día Universal de los Derechos Humanos

a los Chicago Boys y al caballo sin jinete
escoltando al féretro.




Rolando Revagliatti (Buenos Aires, 1945)

viernes, 7 de septiembre de 2018

ALEJANDRO ROBINO Escribir es percibir detalles




     Es tarde y aeroparque tiene poca gente en la sala de pre embarque esperando la salida de los últimos vuelos. Escribir es percibir detalles. Junto a la puerta nº10, veo dos carritos de limpieza: La acumulación me llama la atención y me despabila. Algo pasa. Junto a ellos, hay cinco empleados de limpieza. Busco. Hay tres carros más abandonados a lo largo del pasillo impoluto. Tras el vidrio, veo una mujer pegando corazones de papel en el vidrio de la manga. Los pega amorosamente y luego empieza a pegar letras. Llaman a embarcar en cinco minutos y otro panzón que también comienza a hacer la fila se fastidia:
     -Podés creer que viene ella -le dice a un muchacho que lo acompaña.
     -Mirá -descubre el joven el cartel improvisado- le pusieron "bienvenida".
     -¿No la entienden que ya está? Vení, nuestra fila es la de skypriority -y parten hacia su pequeño privilegio.
     Yo los entiendo. Lo que más detestan del pobre es que no se resigna. Esa fue Evita que les pudrió la cabeza. Y ahora esta.
     Decido escanear la hilera abandonándola. Quiero saber que se dice. Mi propia encuesta. Así que pago el costo de entrar último y voy recorriendo la erupción de comentarios cuando la deducción comienza a generalizarse. Comienza a embarcar el vuelo 1882 rumbo a Río Gallegos y el gusano humano, perezosamente se desplaza delante de mí. El cholulismo se manifiesta alertando cámaras, las pupilas sonrientes a muchos nos comulga, en tanto el odio rancio habla bajo hacia el costado. Cada tanto algún desdén se envalentona y toma vuelo. Soy el último. Presento el pasaje y el documento y me adentro en la manga. Dos hileras de trabajadores de diversos rubros escoltan el pasillo. La esperan en silencio. Van a blindarla con amor y para eso están ahí, poniendo el cuerpo. En el salón, las chicas y muchachos de limpieza tienen apoyada una mano contra el vidrio y también aguardan. Entro en la nave. Asiento octavo C. Junto a mí está el tipo del salón. Está pálido. Mientras me pongo el cinturón veo que toma una pastilla. Me sonríe nervioso y explica:
     -No me gustan los aviones.
     Ella llega rauda y se sienta en la segunda fila e inmediatamente se cierran las puertas del avión rumbo al despegue. Me puteo por no tener un ejemplar de "instrucciones" encima para regalarle. En la pista varios brazos se levantan con los dedos en V. El chabón observa por la ventanilla y resopla.
     -Encima esto. Te juro que no entiendo.
     -Estoy seguro. La mezquindad aliena.
     -No entiendo.
     -Que cagar más alto que el culo llena la cabeza de mierda.
     Y le sonrío, abocándome a la lectura de la revista de la aerolínea. Entre el cagazo del vuelo y el desconcierto, se queda en el molde. Tuvimos un viaje de silencios paralelos.
Hoy bajo a desayunar. El Hotel es paquete y todos hablan bajito, para adentro, como conteniendo un pedo. Lo veo al joven desayunando, me reconoce y le hace un comentario al gordo. Levanto el brazo izquierdo, hago la V y exclamo fuerte y claro:
     -Buenos días.
     No necesito de nada más. Solo basta recordarles mi esperanza para joderles el día.


Alejandro Robino, argentino, dramaturgo, director teatral y docente.

miércoles, 5 de septiembre de 2018

RICARDO RUIZ Lee en la red




lee
en la red
matan a un niño
un joven una mujer
un libro
su corteza abierta
en teoría y en pdf
dice: siempre hay
a quien matar
su imagen
extraña
luminosa
o terrible
ningún orden
exime
de la muerte
cotidiana
para nacer
del duelo
de los sueños

no
de ver ciego
“leer
en la letra”
su más allá
de lo que
en su pensar
el amor cuida

espeja
en su cumplir
palabra
por
palabra
lo espeso
real

cae
en la misma red
en su fuera
otra vez
matan


a la sombra
del silencio
en su noche
asoma
si pudiera ver
esa lengua que lame
la espalda sus hilos
temblando
antes del lenguaje
una mirada
oblicua
agua
de lo común
el pulso
del recuerdo
futuro
un aire
que murmura
en los cuerpos
el envés del aura
gotas danzando
en lo que decimos
tiempo
las manos
que lo vibran
nota a nota
en sus huellas
o ruinas

no calla

en los huesos
azar su voz
quiebra
y canta

“mousiké”



De los husos del no, libro inédito

perra
de tristes huesos
come
de penas que
golpearon
nos de la luz
el alma
rompe
su boca
de cantar
sus pies en ronda
todavía
dura de morir
tantas veces
voz contra
la ilusión
del olvido

¿cava de la furia
del amor sus cuerpos?
¿desmueren?
¿debajo de las ropas
al signo del terror
vence?

así
rompe sus pies
en ronda
de cantar
el alma
en penas
que golpearon
nos del amor
sus cuerpos
contra voz
del olvido
del terror
debajo de las ropas
su signo vence
perra de la furia
de la luz
sus huesos cava
y come


De huesos de otros vientos

Ricardo Ruiz (Buenos Aires, 16 de noviembre de 1953). Foto: Jmp

martes, 4 de septiembre de 2018

ALEJANDRO SCHMIDT Otros infiernos





De nuevo internado
Las corporaciones médico farmacológicas
Las políticas perversas sobre el cuerpo
La sumisión ante la arrogancia médica
Su saber?
El sistema que cuando atravesó tu cuerpo
Te deja con el alma que tengas
Y ahí te quiero ver
No hay Mutual
Promoción
Ni cuotas
No recuerdo que poeta francés dijo
Hay otros mundos pero están en éste
No conozco
Pero lo que si comprendo
Es que hay otros infiernos y están en las instituciones médicas y en sus discursos
sean los que sean




No hace falta pero
Ya se van a acordar

El fondo de la poesía
Es la piezita del fondo
Ésa donde guardaban
El loco
La loca
De la casa

Y las palabras que llegan
Como la charla en un bar
Repleto de televisión

Ya se van a acordar
De quien trajo el deseo
El mal menor

Después
En la nostalgia falseada
De los aniversarios
Se cumplirá el olvido

Y todo es un misterio espantoso

Una luz amada entre cuchillos




“Días hundidos en un misterio silvestre”

Por el colectivo
Las ropas sueltan
Una fragancia de humo
Leña
Querosén

Los taxis detenidos en la niebla gruesa
Llaman
No son llamados

Como si un gran pájaro
Te tomara en su pico
Y te llevará al silencio de otra soledad
Comprendes que
Estrecha es la cama de pensión
Amplió y blando
El mundo de los sueños




Quién pregunta
Y más
Quién responde


Alejandro Schmidt (Villa María, Provincia de Córdoba, Argentina, 3 de mayo de 1955). Poeta, escritor, editor.

lunes, 3 de septiembre de 2018

GUILLERMO SAAVEDRA Lo que el memo eructó bien de mañana




A UN PELANDRÚN VIRTUAL, MAL EDITADO

Gobelino de carne purulenta,
berberecho enquistado en el ojete
de un país vaciado y al garete,
este Chucky imperfecto y con tormentas

pasó el fin de semana allá en Olivos
farfullando entre hipos oligarcas
el modo de mentarnos a las Parcas
sin decir que gestiona pa’ los vivos.

Pero incluso después de dos intentos
rebozados con Barba ecuatoriana,
lo que el memo eructó bien de mañana
huele a mierda aplicada con fomentos:

“Lo que cuesta ya nadie te lo saca”,
dijo el cheto blandiendo una matraca.


A UN TUBÉRCULO PÁLIDO Y CONTUSO

Ni Fino ni muy chiaro el escalope
que la va de ministro y es escoba
que todo lo que barre se lo roba
salió a vender buzones al galope.

Zarigüeya embebida en los orines
de un baño de Retiro clausurado,
en tren de manotear ya se ha afanado
la mosca para hacer tres mil jardines.

Surfeando una denuncia por abuso,
este callo plantar con pie de atleta
de una piara sin rumbo y en chancletas
es pálido tubérculo contuso.

Y allí donde haya gente que resista,
verá una alianza troskokirchnerista.


CONFESIÓN DE PARTE DE UN CANALLA

No suelo suscribir la trajinada afirmación “una imagen vale más que mil palabras” porque, como todo aforismo, está sostenida en un espíritu apodíctico que no habilita otra cosa que una adhesión acrítica y sin fisuras. Pero hay que admitir que esta foto de Noticias Argentinas que ilustra la nota de Página/12 sobre la visita del Gato con Botas al controvertido yacimiento petrolífero de Vaca Muerta parece una prueba cabal en favor del poder de síntesis de una imagen.
Basta con ver el aspecto que le confieren a este batracio fuera del charco ese casco y esas antiparras –una suerte de superhéroe rengo, de adalid de la desgracia, de aviador suplente expulsado de la Luftwaffe por falta de autonomía de vuelo–; alcanza con vislumbrar esa media sonrisa fruncida y cheronca de tahúr dueño de todos los garitos para convencerse de que, mientras el país esté en sus manos y en las de la recua que lo circunda, la frase que lleva inscripta sobre la pechera del mameluco, precisamente encima de donde, en los seres humanos, late un corazón y, en este turrón alcanforado, se esconde la billetera es, mucho más que una profecía, una confesión de parte: EL FUTURO ES VACA MUERTA.


Guillermo Saavedra (Buenos Aires, 7 de octubre de 1960). Poeta, escritor…