Mostrando entradas con la etiqueta Néstor Kirchner. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Néstor Kirchner. Mostrar todas las entradas

domingo, 30 de abril de 2023

JORGE GILES A la compañera María Cristina Verrier



     Siempre fuiste bella, María Cristina Verrier. 

     Estoy hablando de vos. Dramaturga, escribiste unas treinta obras de teatro. Ejerciste el oficio de periodista. Te enamoraste más tarde de Dardo Cabo. Siempre fuiste bella. Te definías como romántica y revolucionaria, y lo eras de verdad. Una noche le llevaste a Dardo la idea de tomar por asalto, no el cielo todavía, pero sí un avión de Aerolíneas Argentinas para aterrizar en Malvinas porque en la revista Panorama donde trabajabas te informaron la llegada al país del príncipe consorte de Inglaterra y que el dictador Onganía preparaba desfiles y homenajes obscenos para la memoria colectiva. “No lo vamos a permitir”, dijiste imperativa. “Allá vamos” respondió tu gran amor, hijo de la resistencia peronista. Y allá fueron un 28 de setiembre de 1966 al mando del Operativo Cóndor y elevaron sobre el suelo patrio de las Islas siete banderas argentinas. Tenías 27 años y eras la única mujer del grupo de 18 jóvenes. Siempre fuiste bella y decidiste que el tiempo no retratara tus dolores. Te gustaba la música y hubieses preferido escuchar a Debussy, uno de tus preferidos, mientras iban viajando hacia Malvinas, desviando el avión que se dirigía a Rio Gallegos. Fueron presos todos por la dictadura que mandó un barco para traerlos a la cárcel por semejante desvarío nacional, popular y revolucionario. Desde entonces guardaste y escondiste las siete banderas en la sombrera de tu abuela, a salvo de sabuesos vendepatrias que no dudarían en robártelas si las encontraban. Era tu promesa militante a Dardo antes de que él caiga nuevamente preso por su militancia peronista y montonera. De esa cárcel lo sacaron una noche de 1977

y lo fusilaron. Dardo hubiese preferido morir en combate contra los ingleses o contra esos mismos dictadores de cabotaje. Pero los muy cobardes lo esposaron por la espalda al héroe de Malvinas y la resistencia, le vendaron los ojos y lo llevaron junto a su compañero Pirles y otros más a un costado de la ruta, simulando una fuga y los fusilaron. En ese tiempo murió la pequeña hija de María Cristina y Dardo. Era la patria del dolor para esa generación diezmada. Y María Cristina se aferró a la sombrera desde entonces hasta que aparecieron en el horizonte un tal Néstor Kirchner y su compañera Cristina, dos veces presidenta y ella sintió que era el momento de entregar el mando de las siete banderas malvineras y escribió una carta a Cristina y le llevó las banderas a Olivos. 

     “Y desde aquí un profundo grito de VIVA LA PATRIA al Gaucho RIVERO, que en su tiempo defendió las Islas a caballo y a degüello y murió en su ley en la Vuelta de Obligado. Dame un recibido y tu opinión. Posdata: Esta centinela te está pidiendo que la releves. Un abrazo fuerte. Adelante, que a su tiempo todo se da. Será justicia”. Finalizaba su carta fechada el 1° de agosto de 2012. 

     Cuando estuvo con la entonces presidenta pidió que la bandera más embarrada, la más guerrera de todas, sea depositada en el mausoleo que guarda los restos del presidente Kirchner en Rio Gallegos. Y allá está desde entonces. Decir que siempre fuiste bella, es una forma de decir que jamás dejaste que el tiempo destierre al olvido la Causa de tu vida. 
Hoy me dijeron que te habías muerto casi en soledad, María Cristina. Pero es mentira la muerte y es mentira la soledad; te rodea un pueblo, María Cristina, te abraza Dardo Cabo, el amor de tu vida, la Patria te agradece eternamente y te llora Malvinas que conoció tu coraje y tu belleza y que guarda tu nombre para el día que volvamos a las Islas, como siempre soñamos que vamos a volver. Hasta ese día, compañera amada. Y hasta las Malvinas, siempre, María Cristina Verrier. 

martes, 20 de diciembre de 2016

Ariel Prat, Cuando todo era ruinas


MURGA DEL FLACO

Oh Oh Oh…

Cuando todo era ruinas la casa en llamas dolor, penar.
Ruido de cacerolas, rotas cadenas, mejor ni hablar.
Milicos, liberales pasando lista a la impunidad…
Desde Río Gallegos contra los vientos dentro y afuera.
Pero cambiando el aire que nos faltaba a la Patria entera.
Curando las rodillas sin las recetas de aquellas fieras.
Bajando al fin los cuadros metiendo en cana a toda esa mierda…

Murga del Flaco…

Pero toda su rabia que a todos ganas nos devolvió.
Se lo llevó temprano y un pueblo erguido lo despidió.
Como otro 17 llegó la gente con emoción…
Hoy nos legó el orgullo de hacer más grande a nuestra Nación.
Hay que seguir curando lo que aún lastima en el corazón.
Nos dejó con Cristina más justa y libre será Argentina.
Luchando sin tristezas no perderemos nuestra alegría…

Murga del Flaco…


Escribe Ariel Prat : "Recuerdo de hace 15 años, fragmentado...iba la noche del 19 en el 99 hacia Radio Nacional, me entrevistaba Diego Bonadeo. El chofer paró antes de la 9 de julio y dijo que no seguía porque no iba a poder cruzar. Nos asomamos y vimos el impresionante piquete cacerolero de la zona paqueta que bajaba del norte. Crucé la avenida a pie y ya en la radio estábamos pendientes de la tv más que de otra cosa. Diego me quiso convencer de alcanzarme con el auto pero yo salí derecho para la plaza a la que no llegué nunca. Unos gases me dejaron forfai y me senté en el cordón de una vereda cercana al obelisco. Ayudé a unas mujeres, una se desmayó...terminé con varios, recuerdo entre ellos a Leo, el baterista de Attaque, encerrados en La Academia de Callao, porque los encargados cerraron...fue como un sitio dentro de otro que era la ciudad...yo estaba sin pertenencia partidaria, peronista desencantado no representado por nadie...a los dos meses, después de tocar en La Trastienda y con una ayudita de mis amigos, me fui para España aprovechando una gira por Aragón y País Vasko...hasta junio del 2004 no regresé...ya Néstor asomaba en mi corazón y reanimaba mis ganas que su rabia me contagiaba...". 

LUCHANDO SIN TRISTEZAS NO PERDEREMOS NUESTRA ALEGRÍA…

viernes, 28 de octubre de 2016

Néstor Kirchner, No hay ningún momento que se pueda comparar al amor



NO HAY NINGÚN MOMENTO QUE SE PUEDA COMPARAR AL AMOR

“Si el camino surge de la nada
será que mi canción llegó hasta el sol

Si algo te sacude sin sentido
será que la canción llegó hasta el sol

La tristeza se va como una luz
todo es armonía a mi alrededor
y está bien

Alguien va subiendo la colina
será que la canción llegó hasta el sol

Y otro va muy loco, hundido en su mente
será que la canción llegó hasta el sol

Una brisa volará en el amanecer
y un extraño tiempo nos envolverá por fin

Esta noche se oirá dentro de tu piel
no hay ningún momento que se pueda comparar al amor

Si se escucha el eco, si el viento dice adiós
será que la canción llegó hasta el sol”


.
(Luis Alberto Spinetta)

jueves, 27 de octubre de 2016

Néstor

Para que la inmundicia que estamos padeciendo no nos llegue al hueso.


"(...) Quisiera que me recuerden 
junto a la risa de los felices, 
la seguridad de los justos, 
el sufrimiento de los humildes (...)"

Joaquín Areta 

lunes, 27 de octubre de 2014

José María Pallaoro, Al compañero Néstor Kirchner


Carlos J. Aldazábal, Y sin saber estábamos



(Y sin saber estábamos)

El hielo no fomenta los abanicos
ni los suaves modales que ensayan los hipócritas.

Por eso te acusaban con el dedo,
por el saco mal puesto, la crispación y el grito.

En contra de los buitres que ensayaban excusas
se proyectan los retratos de la ESMA
y los pañuelos blancos y la Justicia blanca.

Porque la nieve traía un viento nuevo,
un viento que soplaba desde el Sur, desde el Norte,
en todos los sentidos de esta América Nuestra,
América dispuesta a escupir en el plato
de las sobras podridas del Imperio.

Así pasó la Historia:
las cosas ocurrían bajo un manto de nieve,
y sin saber estábamos esculpiendo en el hielo
con todos los temores que da el frío.

Ahora que te has ido el temor no es escarcha
y los caranchos vuelan buscando otro cadáver:
con sus sacos bien puestos, con sus modales tibios,
con grandes abanicos para sus ambiciones
que se pusieron gordas equivocadamente.

Porque ahora sabemos y estamos donde estamos:
seguimos esculpiendo en el hielo, en el aire,
con Cristina, con Evo, con el Che, con Evita,
con Correa, con Chávez, con todos los exentos
de los buenos modales. Con todos nuestros muertos.

Porque no volverán aunque no cese el llanto:
ruptura de glaciar que tanto duele
por la forma vikinga en que te lleva
ese hielo celeste de la Patria.




a Néstor Kirchner, inédito, 27/10/10

jueves, 19 de junio de 2014

Rodolfo Mattarollo (1939-2014), homenaje al doctor Néstor Carlos Kirchner

HOMENAJE AL DOCTOR NÉSTOR CARLOS KIRCHNER

Jardines del Palacio de Luxemburgo, Paris,

23 de mayo de 2011

Al principio fue la sorpresa. Después de años de vacilaciones triunfaba la justicia. Néstor nos había relatado la crónica de esos días agitados antes de la transmisión del mando en 2003. Nostálgicos de la dictadura lo habían buscado para proponerle un arreglo. Hay que pensar en lo que era la situación crítica del país en aquel momento.

Esos políticos alegaban que el Presidente debía tener las manos libres para gobernar.

Agregaban que la cuestión de las responsabilidades por crímenes de lesa humanidad, debía dejar de  ser un fantasma que se paseaba  por la escena pública. Sus visitantes,  aseguraban tener los  necesarios recursos para ello. ¡Ah, los recursos para una política de impunidad! los contactos, la prensa y sobre todo los jueces. Se entusiasmaban, para ellos nada era imposible en el camino de la impunidad.  Prometían obtener una absolución definitiva de los represores por medio de una sentencia de la Corte Suprema de la época. Con plena conciencia de la fragilidad política de su situación, Néstor los habían tranquilizado diciéndoles que se calmaran, y le dejaran a él la gloria de semejante solución. Es sabido que ocurrió todo lo contrario. 

Néstor reconcilió con la política a vastos sectores de la población y especialmente a los provenientes de la juventud de origen social modesto. Hablo aquí de la política no sólo como experiencia práctica, sino también como una actividad humana fundada en valores. Por favor, ¡no se sonrían!. Era una manera de confirmar la antigua idea según la cual el poder carece de legitimidad si no está basado en los derechos humanos, una manera de reafirmar que una democracia avanzada no podría estar reducida a las alternativas electorales.

América Latina vive una etapa de florecimiento. Para aquéllos que se obstinan en ignorarlo es preciso  decir que no siempre es fácil  ser contemporáneos  de nuestro propio presente. Los sacrificios de los caídos en el sub-continente luchando por un mundo mejor, no habrán sido inútiles. Néstor no se resignó a considerar nuestras naciones como las repúblicas etéreas de las que habló un Bolívar desilusionado. El mejor homenaje que podemos ofrecer al Primer Secretario General de UNASUR es el de la unidad de nuestros pueblos.  A veces difícil, nunca imposible.  La mejora reciente de las relaciones  entre Colombia y Venezuela así lo demuestra. La presencia fraternal de una oficina de UNASUR en Haití, de la que soy representante y embajador, también es una demostración de ello. Dos realizaciones que son parte del legado que nos ha dejado Néstor Kirchner, ese presidente inolvidable, ese constructor de porvenires, ese hombre que cambió Argentina y contribuyó a transformar América Latina. Ese hombre de la sorpresa histórica. Una de esas sorpresas que constituirán, esperémoslo así, una novedad perdurable.




Rodolfo Mattarollo nació en 1939 en Buenos Aires, y falleció en la misma ciudad el 18 de junio de 2014. Autor de numerosas publicaciones relacionadas a la temática de los derechos humanos y el derecho internacional en su país y en el exterior. También destaca su labor como periodista, escritor y poeta.

viernes, 28 de enero de 2011

José María Pallaoro y el diamante más hermoso



NÉSTOR


Sos la piedra

con la que

construiremos

el diamante

más hermoso



a nuestro compañero, néstor kirchner

y a la gloriosa jotapé, la de ayer, la de hoy



José María Pallaoro nació en La Plata en 1959.Texto extraído de Los Ojos

Jorge Ariel Madrazo y un país que puede enamorar



ENVÍO

a N.K., i.m.


NO es verdad, hermanos,
dijo,
que este país no nos pueda
enamorar.
No hay que escuchar a los augures,
dijo.Y casi para mí
(lo juro) dijo:
Mire, choque aquí estos
cinco.
Le dije
que está bien que podíamos
poner pies a la obra
o manos a la obra o
lengua, dentición,
cartílago.

La saliva de la batalla, dijo,
quema, la muy dulce, la camisa, el amor.
Desde la multitud
sobrevuelan pájaros-silbidos.
Vénganse, hermanos,
luego dijo,
con su oxígeno elemental y
las frentes levemente
obstinadas. Valientes o
un acaso
titubeantes tal vez.

Suelten el puño, hermanos, dijo:
cuatro dedos:
murra del pueblo
y vendrán
los ademanes las generosas manos
de cuero
Yo, dijo, aquí vine aquí me quedo,
Que a lo largo lo ancho
Que el común
enemigo.
Estar a la altura y
demás, es sabido.
No dijo:
Aquí ya parto aquí me duelan, aquí
me apersono colectivo. Dijo:
tomen el buen uso
de la palabra, de
los sueños, de la batalla,

unidos, siempre,
dijo.


Jorge Ariel Madrazo nació en Buenos Aires en 1931. Poeta, narrador y periodista.

jueves, 27 de enero de 2011

Néstor, con una antorcha nueva en cada mano vas a volver cubriéndonos de gloria

NUNCA MENOS


Lágrimás que riegan todo el suelo en primavera

de tu mañana azul

que llora y ríe


Nombre que se talla para siempre en la madera

de los que sin estar

están y viven.

Voces que te nombran y se aferran al color

de esa insolencia alegre

que inventaste


Ríos muchedumbres de un subsuelo que volvió

para quedarse acá

para quedarse ¿Será verdad

que te fuiste con la historia

o será que aún no despertamos

y que con una antorcha nueva

en cada mano

vas a volver

cubriéndonos de gloria?


Nada más al sur de esa indómita armadura

hecha de ayeres

blindada de ausencias

mágica de amores y de sueños que perduran

sin arrumbarse

en ninguna puerta


Todas esas risas que viniste a restaurar

desde un recóndito

rincón dormido

hoy cubren las paredes que no pueden derrumbar

los que sin luz ni sol

están perdidos


¿Será verdad

que te fuiste con la historia

o será que aún no despertamos

y que con una antorcha nueva

en cada mano

vas a volver cubriéndonos de gloria?

Y esos mil jirones que dejaste en el camino

serán retazos si

de una bandera

marcas imborrables en el cuerpo

que elegimos

llevar hasta el final

y nunca menos.


(coro murguero)

Nunca menos

que ese fuego en la mirada

que las voces acalladas

retomando la canción


Nunca menos

que tu nombre en las banderas

que tu plaza siempre llena

de esperanza y de pasión


Nunca menos

que pañuelos en tu casa


Nunca menos

que justicia sin perdón


Nunca menos

que el paisaje repetido

de este sur tan aguerrido

y diciendo al fin que no


Nunca menos

que esas risas desdentadas

aguantando la parada

que supieron conquistar


Nunca menos

que un enjambre de morochos

arruinándoles la foto

a los que no vuelven más


Nunca menos

que los pibes en el centro


Nunca menos

que vivir con dignidad


Nunca menos

que la Patria que soñamos


Nunca menos

Ni un paso atrás.