jueves, 23 de junio de 2016

Alberto Szpunberg, Todo poema convoca a asamblea permanente



Así en el cielo como en la tierra, la araña prosigue,
ahora entre las vigas maestras de otra inmensidad:
ya no es un hilo de arena sino el desierto entero
lo que se cuela hasta el centro más árido del corazón;
y el hambriento arroja su plato que ya no cesa
de rondar el mundo a la espera del momento:
—Siempre es éste el momento, ahora o nunca…
—Todo poema convoca a asamblea permanente.



Alberto Szpunberg (Buenos Aires, 1940). 

miércoles, 1 de junio de 2016

Eduardo Dalter, Mal culiao


VECINOS CON BANDERAS

                               
                    ¡Mal culiao, mal culiao!

Le gritan de todo al ingeniero
      cuando llega
con su gobernadora flaca y
      sus custodios.
El aire a la redonda se tensa
      y se sacude
como con el revuelo de mil
      pájaros.
La gente que está con sus
      niños
en los brazos, o con sus
      viejas bicicletas,
o con sus ganas, ahí justo
      en la esquina,
debe ir recordando los
      momentos
más amargos de su vida,
      sino
no se explica tanta saliva
      y pulmón
y tanta fuerza para gritarle
      las barbaridades
más sinceras que le gritan.
      El ingeniero,
como todo zorro extraño,
      pone cara
de perro distraído, mente
      en blanco,
pareciera, o quizá, pienso,
      debe
decir tragame tierra, o qué
       es esto,
o la puta madre. Y así,
       página
barata y ruin de nuestra
       historia
patria, es también como
       los connacionales
estamos viviendo esta
       dura
y cochina temporada en
       el infierno.




.