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miércoles, 8 de mayo de 2019

VICENTE ZITO LEMA Como un inolvidable, feroz y dulce deseo





La mano con la que Darío Santillán paró la muerte,
la mano gigante de Darío, la mano sin tiempo y sin
fronteras de Darío, que a partir de ese momento
se alzó en los paredones, en las pancartas y afiches,
en los fondos y en los frentes, sobre cualquier género
o papel, en todo espacio, en lo material que nos cubre
y en el espíritu que nos desnuda; aún en el agua y en
los sueños, esa mano más alta que las montañas del
Oriente, más aullante que el aullido que estremece
la luna, más eterna que la misma eternidad, esa mano
para proteger a Maximiliano Kosteki, el joven
piquetero, el joven artista que moría junto a él, el joven
y viejo Darío Santillán, que a los 20 años se hizo cargo
del dolor del mundo.
De la rebeldía del mundo.
Acaso para que el mundo y nuestras vidas
no murieran del todo.
O, mejor dicho,
para resucitarnos.
La mano de Darío más bella que nunca.
Porque ahora esa mano era de todos.
Como un inolvidable, feroz y dulce deseo.


Vicente Zito Lema (Buenos Aires, 1939). Poeta.

jueves, 8 de febrero de 2018

Vicente Zito Lema, Un abrazo al que asesina por la espalda



PIEDRAS Y PERROS


Ya nada puede ocurrir en la ciudad
que despierte sorpresa.
El misterio del arte se confunde
con la oscuridad del día.
Todos los vicios se unen
en la verdad final:
    Aquí vive el que puede pagar
La belleza sigue allí, casi nos perdona.
El cielo no se mueve de lugar,
hasta podría caer una lágrima.
Tal vez algún monstruo en la casa
de gobierno alabe la muerte
con algo más de ingenio.
Por ejemplo, un abrazo al que asesina
por la espalda.
Subida más la noche se salda a palazo limpio
la brega por las sobras de comida
en los Macdonalds de la ciudad.
Son cosas de niños… Nadie se muere ahí…
Las mujeres de antes / que saben de plantas
lo recomiendan: las alegrías del hogar
no necesitan mucho sol ni mucho agua.
También se dice: cuando hay luna llena
para espantar a los perros
se necesitan piedras.



Febrero de 2018

.

domingo, 29 de octubre de 2017

Vicente Zito Lema, Los vidrios sucios de un país sin amor


SANTIAGO MALDONADO


Un Cristo pálido
cuya luz se despide
sobre los vidrios sucios
de un país sin amor.

Con toda el agua del río Chubut
jamás se lavarán las culpas.

Qué esperan para marcharse
los dueños de la muerte.

Ni pudor, ni siquiera piedad
en las bocas del rencor.

Hay un viento de silencio
y vos te hiciste cargo
del dolor que más duele.

La memoria del horror
es un instante eterno.


.

martes, 24 de octubre de 2017

Vicente Zito Lema, Me declaro rebelde


ME DECLARO REBELDE


Si el mandato de las urnas es vivir
para la muerte, me declaro rebelde.

No mataré a ningún inocente. No me pondré
la soga en el cuello. No pisaré
la cabeza del que está caído. No
besaré los labios del poder.

Voy a abrazar a todos los que no
bajan los brazos.

Voy a mirar en los ojos a todos
los que no quieren ver. Voy a subir al tren
a las estrellas... Hay lugar
para todos.



23 de octubre 2017 en un día de pasiones tristes

miércoles, 11 de enero de 2017

Vicente Zito Lema, Eva Perón resucitada

AGRAVIO A LA CULTURA

“La lucha es eterna entre la luz y las tinieblas…”

     En este momento histórico de nuestro país, cuando crece la conculcación de todas las calidades de Derechos Humanos, y en la ciudad de Mar del Plata, específicamente, es visto por todos el deterioro de la cultura por responsabilidad de la administración local, hecho que sigue siendo denunciado por prestigiosos referentes del arte y el pensamiento.


     Un verdadero agravamiento de la situación lo constituye la violenta irrupción de efectivos del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires en el Complejo Cultural Radio City Roxy el día 9 de enero en horas de la noche.


     Bajo oscuras argumentaciones que no supieron explicar ni precisar trataron con inusitada violencia al director de la prestigiosa institución, Marcelo Marán, hombre de vasta trayectoria en el teatro argentino, por todos conocido y respetado, menos por quienes llevaron a cabo este atropello a la cultura en nombre de las autoridades de la Provincia de Buenos Aires. 


     Todos debemos sentirnos agraviados y especialmente me involucro en esta situación por estar representando la obra de mi autoría Eva Perón resucitada en una de las salas del complejo. 


     Me solidarizo entonces con Marcelo Marán, y con los artistas y productores que esa noche fueron maltratados. Pido al gobierno municipal y provincial respeto por la cultura de nuestro país y mayor cumplimiento del mandato de los Derechos Humanos, ya que ninguna elección política legitima su violación. 


     Exhorto a los compañeros del arte y el espectáculo con quienes comparto el trabajo artístico en la ciudad y especialmente los que somos parte de esta aventura en la sala Melany, que integra el complejo, a que se manifiesten públicamente contra este verdadero agravio que perjudica a Marcelo Marán, al teatro y nos toca a todos.


Vicente Zito Lema,
Mar del Plata, 10 de enero 2017

viernes, 9 de enero de 2015

Vicente Zito Lema, Hay gente que es artista sin tener conciencia de serlo



     Hay gente que es artista sin tener conciencia de serlo. Entonces sueña como artista, vive su arte y su vida es un arte. Es gente que anda por ahí, sin pensar en la tierra ni en el cielo y que actúa en armonía con algo que la sociedad no quiere que exista y por ello se confabula para abortarlo, o destruirlo. Es una armonía que se establece con lo desconocido, por lo perverso, con lo reprimido, con la ansiedad de lo divino y con el deseo de matar, que es igualmente necesario. Esa armonía los hace artistas, y no tienen conciencia de serlo. Si tuvieran conciencia, quizás todos los prejuicios que existen sobre el significado que socialmente tiene “ser artista” harían que su acción vital se desvirtuara. Son inocentes. ¿Los hay? Sí, los he encontrado. Están en los loqueros, a veces debajo del agua, o en un bodegón. Me topé con una artista en Neuquén, parecía una piedra de oro tirada en la montaña. Hablando horas y horas con esa vieja mapuche supe que ella era la vida y era el arte. Me dijo que antes de hablar conmigo iba a soñar conmigo, que en el sueño descubriría si yo era o no una persona de confianza. Tuve la suerte que al otro día me hablara y pude entender la lengua del viento. Ella encarnaba todo lo que yo había puesto en la utopía del arte. Ella era la poesía, mientras tomábamos mate, me acariciaba la mano y escuchábamos al viento. 
     Cuando esos auténticos artistas toman conciencia de lo que son, racionalizando lo que son, esa conciencia los “ensucia” y dejan de ser lo que eran en el mismo momento en que lo descubren. El espejo se rompe en mil pedazos. 
     Hay también gente que tienen conciencia de lo que es el arte, a partir de la reflexión sobre lo que están creando. Y aquí surge otra vez la división. 
     Están quienes actúan de artistas, impostan de artistas y a partir de la cristalización de la pose y del rol pervierten y depravan el verdadero sentir del artista. Cuanto más crece el reconocimiento social más pronto se convierten en la máscara, en la payasada de aquello que, como hombres, alguna vez fueron. 
     Hay otros, los hay, los hay, que sufren con el peso de esa conciencia y pese a todo intentan mantenerse limpios, lo limpio que se puede ser en la gran cloaca. La pregunta que se hace esa clase de artistas es: ¿Estoy vivo o estoy muerto? 
     Yo creo que se responden, con vómitos y balbuceos. Creo que el artista de esta raza sabe que está muerto, condenadamente muerto, y tiene miedo de estar muerto y por eso hace arte. Para escapar de su muerte. 




Revista Cerdos & Peces, edición de agosto de 1990.
Vicente Zito Lema (Buenos Aires, 1939). Poeta.

Imagen: VZL. Extraída de FM 713, Radio Escolar, Esquel, Chubut.

lunes, 5 de enero de 2015

Vicente Zito Lema, En memoria de Darío Santillan y Maximiliano Kosteki


PRELUDIOS DEL AMANECER

In memoriam de Darío Santillan y Maximiliano Kosteki

      
La noche se presenta pálida y agónica,
como un testigo de la eternidad.
Tengo preguntas en la noche...
La luna quiere saber de la mar: su estruendo
la espanta.
Enjambres de flores alucinadas increpan
la desolación de la tierra: se marchitan.
Los niños escuchan las respuestas de las
vírgenes de la piedad: el hambre
no tiene respuesta.
Mil preguntas flotan en la noche. En el cielo
del perpetuo socorro se alza una cascada de nubes rojas.
Sé que la agonía de la noche es el comienzo
de todas las agonías. Veo venir los soplos
siempre agrios del dolor que se llama soledad.
Sé que la eternidad de la noche es un espejo
de la fugacidad del día. Escucho los pasos
de la resignación. (Son de mi cuerpo,
pero no son míos...)

La voz de mi madre llega con la liviandad
de un susurro, el viento del sur mueve
las cañas de bambú
y ella aleja la palidez de la noche

-Te conozco. Nunca te resignarás. Ya
de niño preguntabas todo.

-¿Por qué la muerte de esos cuerpos, madre,
sangrando como ríos por la calle?

-¿Por qué la muerte de esas almas, madre,
ya secas como piedras, arrastradas como sacos
de basura, en la estación de tren de Avellaneda?

-¿Ellos que deseaban, hijo?

-Uno se agitaba por el reino de la belleza...
El otro pretendía la justicia del cielo
aquí, en la tierra...

-Ya tienes las respuestas sobre sus muertes, hijo...

¿Siempre será así, madre?
Los cuerpos devorados en su vida…
Las almas perdidas en su muerte…
Los cielos de diciembre son espejos de sangre…
¿Siempre será así, madre…?

Tienes la respuesta en tu propia boca, hijo…
No lo olvides: el que calla, otorga…

La noche avanza sobre el día,
pálida y agónica.
La única eternidad que se escucha es el silencio.
De los muertos es la quietud de la muerte.
De los vivos es la desesperación de la vida.


Vicente Zito Lema, Buenos Aires, 1939. Poeta.

martes, 22 de julio de 2014

Vicente Zito Lema, canto urgente por Palestina


CANTO DE URGENCIA POR PALESTINA

Clamando al cielo desde la belleza opacada de la tierra,
el último sostén cuando la negrura del horror
mortifica aun las nubes, las espanta, son pájaros,
también a los pálidos rocíos, los últimos rocíos, los espanta,
entre espasmos de sangre…
Urgiendo como caballos a la Diosa Justicia, que nació de un vientre
de muerte y quiso ser humana, y tener pasiones,
y que todavía entre ahogos y balbuceos
pugna por respirar, por existir, sea de a poco,
en un tiempo de ferocidad infinita…
de monstruos que trafican cadáveres,
tanto como el oro…
Subidos en la montaña de todas las lágrimas,
y de cada uno de los furores que ponen alas
en la mañana del mañana
a las pacientes lágrimas…
Te decimos Palestina: ¡Gloria a vos!
¡Con toda voz!
También con piedras y con flores para las tumbas,
Que no son tumbas
Son altares de belleza
Son monumentos de memoria
Son dolor a marejadas
Sal que quiere más sal para gritar
desde la herida abierta
como una mar de luz que no cesa, abierta…
¡Gloria Palestina! Amada y mía,
sin nunca verte, con siempre verte…
Tu dolor te vuelve eterna de jazmines, Palestina.
Sin agua y sin comida, seca y roca, Palestina…
Tu pañuelo honra nuestra cabeza, no hay otra diadema…
Tu martirio es un sol de soles, del este y del oeste,
y de la mejor luna, tu pura luna,
luminosa eres, Palestina… gimes con nosotros
y entre nosotros, besamos tu celeste frente, Palestina,
te honramos…
Ese dolor de bombas y misiles, que golpea
es ahora el río del alma donde ahora navegamos
con vos, hacia tu destino de patria…
Llevanos…
Llevanos…
Somos tu agua, Palestina…
Gloria a Palestina
Y maldito seas entre todos los malditos
que la memoria registra
maldito Estado de Israel…
Que humillas a la humanidad en lo que tiene de humano
(hablo de un sueño, también de un murmullo de amor)
Que conviertes en cenizas los papiros de dolor
del viejo pueblo judío…
Que degradas la civilización y te vuelves
realeza de barbarie, holocausto del otro
ese otro que alguna vez fuiste y que ahora
te mira y te ve convertido en su verdugo
¡Has enloquecido y mal de mal Estado de Israel!
¡Has devorado la vida y convertido en sombra
de tu propia muerte!
¡Prendiste fuego al árbol de la vida Estado de Israel!
con la ciega arrogancia del que se puso
fuera del bien y del mal
y de todos los contratos que el hombre
cultivó en el jardín de las palabras
Estás ciego Estado de Israel, ciego de
ciegos de toda ceguera,
eres más que noche…
puro vacío…
mismidad del vacío
allí en el centro de la soledad y del silencio
que se sabe silencio…
¡Gloria Palestina!
¡Y amor para los niños de Gaza masacrados
por el ejército del Estado de Israel!
Esas almitas que todavía tiemblan
Junto a los cuerpitos vacíos
de tanta sangra perdida
Esos niños de Gaza miran al mundo con
nuestros ojos
cuentan su espanto desde nuestras bocas
más que nunca pobres
para nombrar el espanto…
No cerremos los ojos
sin clausuras nuestros labios (la muerte ya
no es cruel, simplemente fría)
¿Quién tejerá los recuerdos
mientras las nubes pasan y pasan,
los cielos continúan con su belleza
y los niños de Gaza son polvo sobre la tierra
humillada y polvorienta…?




Foto: PressTV.