jueves, 31 de mayo de 2018

Guillermo Saavedra, Suenan bombos, Vidal, pero no es fiesta





A UNA FALSA BONDAD PREFABRICADA


Un hada de curiosa residencia
–no en el bosque sino entre militares–
promete bienestar y, sin clemencia,
inflige canalladas por millares.

Su sonrisa dentífrica y buenaza,
subproducto de un chanta ecuatoriano,
se descose si un pobre la amenaza
con su abrazo de oscuro suburbano.

De su madre, la experta en bicicletas,
aprendió a pedalear a los docentes;
hoy ha dicho, entre dulces morisquetas,
que estudiar no es de pobres e indigentes.

Suenan bombos, Vidal, pero no es fiesta:
es el pueblo, va en busca de tu testa. 


lunes, 28 de mayo de 2018

Roque Azcurraire, Un plan premeditado, para venir a reprimir

Roque Azcurraire

NOS TORTURARON, OTRA VEZ

     Hace dos noches que vengo atrapado en la misma pesadilla: una secuencia espeluznante que decidieron grabar en mi propia casa, volviéndome protagonista del miedo que comenzó cuando uno de mis sobrinos apareció corriendo desesperado, porque la Prefectura había golpeado a su hermano arriba del colectivo. Alertados por su agitación, varios vecinos salieron hasta la avenida Iriarte para exigir explicaciones ante un ejército de fantasmas armados, sin identificación. Nada nuevo. Nada raro. Nada casual.

     Mi casa está ubicada en un pasillo de la Villa 21. Y ese pasillo nace justo en la casa de Iván Navarro, nuestro compañero torturado hace dos años por esta misma Fuerza, que hace una semana tiene a 6 prefectos en el banquillo de los acusados por esa causa. O sea, lo torturó la Prefectura y hoy lo cuida la Prefectura, ¿entienden? Pues justo ahí, se les dio por empezar a reprimir el tumulto de personas que habían agitado ellos mismos, con sus maltratos a los chicos. Al principio, traté de apaciguar los ánimos mediante el diálogo, pero poco a poco iban cayendo más y más uniformados, con escudos antidisturbios. No había delito, ni conflicto, ni nadie para perseguir: había un plan premeditado, para venir a reprimir. Así, de una, comenzaron a repartir palazos a mansalva y balazos de goma contra la casa de Iván, donde además vive su papá, que debe declarar el próximo viernes.

     Lejos de cualquier heroísmo, decidí resguardarme junto a los míos en mi domicilio porque lógicamente me asusté, pero nunca imaginé que también ellos irrumpirían en el pasillo, apaleando mujeres y niños, hasta llegar a mi puerta. Sin orden judicial, ¡la rompieron a patadas! Y trataron de señalar que utilizábamos un palo para defendernos, cuando el único palo que había era la "llave" que cierra desde adentro nuestra casa, donde vivimos tres familias juntas, sin cerradura.

     Ante los ojos brillosos de mi sobrinito, embistieron contra todos nosotros, pegándole a mi cuñado, manoseando a mi hermana, arrastrándome por el piso, lastimándonos a todos. Invadidos, literalmente, por quienes vienen a "cuidarnos", terminamos nadie sabe cómo detenidos por vaya a saber uno qué delito y fuimos trasladados hasta la garita en Luna y Luján, padeciendo la misma práctica que aplicaron en los 6 casos de tortura que La Garganta denunció en mi barrio, sólo entre abril y mayo: el "levantamuertos". Gas pimienta en los ojos y esposas en las manos, para vernos retorcidos en el piso. Yo les rogaba que me quitaran las esposas para poder respirar, porque necesitaba frotarme la cara, que se me quemaba en un ardor insoportable. Pero se mataban de risa: "Callate, negro de mierda, que no pasa nada, es todo psicológico", me decían, entre patadas y trompadas.

     Al llegar a la garita, nos tiraron en el piso y hacían fila para golpearnos. Nos obligaban a repetir nuestros nombres, entre rodillazos a las costillas. Y después otra vez, entre pisotones en los pies. Y después otra vez, entre patadas a los tobillos. Y después otra vez, entre piñas a la cabeza. Gritando, como pude, intenté decirles que tengo una hendidura en el cráneo y podían matarme si seguían haciendo eso. Pero la respuesta fue más clara todavía: “Por eso lo hacemos, porque a ustedes hay que matarlos".

     Después de tres horas, mientras un patrullero paseaba a mi hermana por toda la villa, sin avisarle a mis compañeros, ni a mi familia, que la seguían buscando, me trasladaron hasta la Comisaría 30 junto a mi cuñado Pablo. Y sinceramente, otra vez lejos de todo heroísmo, mi desesperación era tan grande que sólo les repetía en el patrullero: “Ya está, basta, si me van a matar, mátenme, pero mátenme ahora”. Yo no hice nada. O sí: luché, luché y voy a seguir luchando, para que nunca más ningún villero deba sufrir esta mierda.
No tengo dudas que me pasa por pobre y me pasa por negro, pero también me pasa por no callarme la boca y por seguir abriendo La Garganta, para que nuestro grito retumbe por todos lados.

     Porque sí, nos pueden encontrar muertos,
     ¡pero nunca nos van a encontrar callados!


Roque Azcurraire,  fotógrafo de La Garganta Poderosa, secuestrado por la Prefectura, aún detenido en la U28.

jueves, 24 de mayo de 2018

Sólo por amor lo canto




HIMNO DE MI CORAZÓN

Sobre la palma de mi lengua
vive el himno de mi corazón
Siento la alianza más perfecta
que en justicia me une a vos

La vida es un libro útil
para aquel que puede comprender
Tengo confianza en la balanza
que inclina mi parecer

Nadie quiere dormirse aquí
algo puedo hacer
Tras haber cruzado la mar
te seduciré
por felicidad yo canto

Nada me abruma ni me impide
en este día que te quiera amor
Naturalmente mi presente
busca florecer de a dos

Nada hay que nada prohiba
ya te veo andar en Libertad
Que no se rasgue como seda
el clima de tu corazón

Nadie quiere dormirse aquí
algo debo hacer
Tras haber cruzado la mar
te seduciré

sólo por amor lo canto



miércoles, 23 de mayo de 2018

Al final del túnel la luz



Al final del túnel la luz de
FMI
REPRESIÓN
AJUSTE
BASES NORTEAMERICANAS EN EL SUR
BUITRES
CANALLAS
CARPETAZOS
CENSURA
CIPAYOS
CLARÍN
COMPRA DE ARMAMENTOS PARA REPRIMIR AL PUEBLO
CORRUPCIÓN ESTRUCTURAL
CORTE SUPREMA
DEPENDENCIA ECONÓMICA
DESOCUPACIÓN
DESPIDOS
DESTRUCCIÓN EDUCACIÓN PÚBLICA
DEUDA EXTERNA
DEVALUACIÓN
DNU
ENTREGA RECURSOS NATURALES
ENTREGUISMO
EXPLOTACIÓN
GATILLO FÁCIL
GENOCIDAS
GUARIDAS FISCALES
HAMBRE
INJUSTICIA SOCIAL
LA NACIÓN
LABORATORIOS
MAGNETTO
MEDICAMENTOS
MISERIA
MONOPOLIOS
NEOLIBERALISMO
OLIGARQUÍA
PERFIL
PRENSA CANALLA
PRESOS POLÍTICOS
RECORTES
RICOS PARA LOS RICOS
SOCIEDAD RURAL
TARIFAZOS
TERRORISMO DE ESTADO
MMLPQTP

lunes, 21 de mayo de 2018

Guillermo Saavedra, La nata vil de Canal Trece





A UN CANALLA QUE HOY VUELVE A SUS FUNCIONES


   Alguna vez, parece, fue sincero
buscador de verdades escondidas;
en un mensuario célebre, primero,
luego en un diario al que ayudó a dar vida.

   No se sabe si por debilidades
–la carne es triste, Stéphane, lo sabemos–
fue perdiendo respeto a las verdades
hasta entonar, ruin, el hit “Cambiemos”.

   Cambió el rigor de dar noticias ciertas
por su obscena opereta de mentiras.
Triste showman, payaso, vaca tuerta,
cuanto más nos engaña, más aspira.

   De todo el periodismo mala leche,
él es la nata vil de Canal Trece.

jueves, 17 de mayo de 2018

Guillermo Saavedra, Infame ingeniero sin discurso





RETRATO DE UN OPTIMISTA AÚN EN FUNCIONES


   Un infame ingeniero sin discurso,
descendiente de chorros y tahúres,
se adueñó del país con el recurso
de globitos, mentiras y gurúes.

   Se rodeó de rufianes y ciclistas,
descansó en una prensa bien canalla,
adobó el corazón de los fascistas,
del poder judicial, hizo toallas.

   Desfalcó, reprimió, dispuso el veto
a cualquier inquietud opositora.
Adalid balbuceante de los chetos,
nos depara un mañana sin aurora.

   Este imán de la patria contratista
hoy deplora haber sido un optimista.




jueves, 10 de mayo de 2018

Guillermo Saavedra, Dónde están, compañeros, las banderas de una pronta y valiosa resistencia





BAJO FONDO

“En el fondo”, decían, “somos buenos”,
e “ir a fondo” supone ser profundo.
No es el caso: nos cae como un trueno
el anuncio de un Gato tremebundo.

Este Fondo que vuelve trae maldades:
más ajuste, más hambre, más pobreza.
Y lo grave es que no son novedades:
Cuando gobierna el rico, trae vileza.

¿Dónde están, compañeros, las banderas
de una pronta y valiosa resistencia?
¿Quién defiende a los rotos, quién lidera
la urgente rebelión de las conciencias?

Hay más gente buscando en la basura
los restos de la fiesta de la usura.



miércoles, 9 de mayo de 2018

Wilson Saliwonczyk, Revolución de alegría





"No va a haber devaluación
No nos vamos a endeudar.
Y no va a haber tarifazos
De luz de agua y de gas.

Vendrá una lluvia de dólares
Y no va a haber inflación.
Vendrá la pobreza cero
Y una lluvia de inversión.

Revolución del salario
También en la educación
Revolución de alegría
Y contra la corrupción.

Se viene el mejor equipo
A salvar a la nación.
Se viene el sinceramiento
Que aprende y pide perdón.

A los indios y a los niños,
Los vamos a proteger.
A nuestros queridos viejos
Y también a la mujer.

Pa´ unir a los argentinos
No vamos a perseguir
Al que piense diferentes
Y no vamos a mentir.

Con diálogo y con respeto
El futuro es educar.
El sueldo de los maestros
Se lo vamos a aumentar".

Y son tan burdas sus trampas
Que ni hace falta el esbozo
De revelar la mentira
Ni nombrar al mentiroso.




martes, 1 de mayo de 2018

Raúl González Tuñón, Prohibido celebrar el 1° de mayo





PROHIBIDO CELEBRAR EL 1° DE MAYO


En la profunda soledad de las fábricas grises
En la oscura herramienta silenciosa
En los quietos arados pensativos
En las minas que guardan el secreto del tiempo
En los puertos que esperan con las naves calladas
En los hangares pálidos y el petróleo cautivo
En el olor a bosque derramado de los aserraderos musicales
En la estación que invaden las libres mariposas
En el bostezo de las frías oficinas
En el libro cerrado sobre la mesa familiar
En la lámpara sola que alumbró la vigilia
En los niños que sueñan con las islas distantes
En el canto que cantan los arrieros y el grillo
En la lluvia que hace nacer las azucenas
En el aire en el fuego en el agua en la tierra
Nosotros nos hacemos presentes con el día
Nosotros los proscriptos miramos allá lejos
Donde la primavera perdida está esperando



Gracias Guillermo Saavedra
Raúl González Tuñón, La veleta y la antena, 1969